Una vez más el consumo se
ha posicionado por encima de la venta de inmuebles y las inversiones. Debido a
la implementación de legislaciones que restringen la compra de dólares en
Argentina y en el extranjero, la venta de inmuebles se ha visto frenada.
Hasta hace un mes, la
situación era diferente: La AFIP solía autorizar la compra del dólar mediante
la muestra del boleto de compra-venta y documentación pertinente que explicara
de donde salían los fondos para hacer la transacción. Este ya no sucede en la
actualidad, y los vendedores no aceptan pesos argentinos, con lo que la
situación se ha frenado, con lo que la rama inmobiliaria se ha estancado. Según
el presidente de la Cámara de la Construcción, Néstor Walenten, "si (...)
se mantiene la tendencia del primer cuatrimestre, el 2012 será el peor año de
la década para el sector inmobiliario, incluso peor que el 2001".
En la actualidad, el
consumo se ha incrementado y los ahorristas comenzaron a comprar automóviles u otros
productos de consumo, ajenos al mundo inmobiliario.
Un punto interesante a
destacar es que si bien la venta inmobiliaria ha disminuido en los últimos
meses (se estima que en marzo con respecto al 2011 fue de un 4,8%), el sector
de la construcción ha seguido en aumento y creció un 4,7%.
Muchos especialistas
estiman que el Gobierno seguirá con las legislaciones actuales, con lo que es
probable que el flujo de inversiones disminuirá poco a poco. Asimismo, se teme
que si la brecha entre el dólar oficial y el dólar paralelo sigue aumentando,
la situación podría empeorar.
Si bien la repercusión de
la economía Argentina en el sector inmobiliario no ha pegado muy fuerte, la
baja en la venta de inmuebles es una realidad, y será cuestión de ver que
sucede en los próximos meses.